Martes, 20 de Septiembre de 2011. Desde el 15 de septiembre, el Concello de Vigo ha dejado de emitir informes de arraigo para que los inmigrantes residentes en ese municipio, unos 16.000 vecinos, puedan realizar gestiones de enorme calado, como la tramitación del permiso de residencia o el reagrupamiento familiar. Así lo ha afirma una carta que ha enviado a las las asociaciones que integran el Consello Municipal das Migracións. Según la administración local, el municipio está asumiendo responsabilidades que corresponden al Gobierno regional ya que, según indica, el Reglamento de Extranjería atribuye a las comunidades autónomas la emisión de los informes de arraigo social y adecuación de la vivienda. Además, la edil de Benestar, Isaura Abelairas, ha descartado definitivamente firmar cualquier convenio de subvención de la Oficina de Inmigración porque, explica, los fondos recibidos son muy inferiores a los que corresponden a la ciudad por número de extranjeros. Y es que Vigo es la ciudad gallega con mayor cantidad de población inmigrante.El tema presupuestario está en el inicio de todo este conflicto, ya que el Concello y la Dirección Xeral de Emigración no se ponen de acuerdo sobre el dinero que se necesita para que la Oficina de Inmigración siga funcionando. Mientras la Xunta ofrece 50.000 euros y pide al Ayuntamiento que costee otros 20.000 euros, el municipio reclama 173.000 euros, que es el monto del coste anual del personal que trabaja en dicha oficina. Mientras, la población inmigrante está en el limbo sin saber qué hacer para realizar los trámites que requieren de un informe de arraigo.
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