
El País, 12-06-2023. Después de años de tensiones y enfrentamientos, la Unión Europea ha llegado finalmente a un acuerdo de calado sobre uno de los problemas más serios y urgentes que estaba afectando a las relaciones entre los socios y que define una senda clara en su acción exterior: el tratamiento de los flujos migratorios. Bajo el principio “solidaridad flexible pero obligatoria”, los Estados miembros han acordado dos importantes líneas: por un lado, endurecer los requisitos de entrada de los demandantes de asilo y por otro que todos los Estados miembros asuman a una parte de esas personas que llegan hasta las fronteras exteriores de la Unión buscando refugio. Noticia completa