La Policía Municipal de Bilbao ha detenido a un individuo -J.M.S., de 32 años y natural de Santurtzi- acusado de estafar a inmigrantes mediante falsos pisos de alquiler. El sospechoso ofrecía a las víctimas el alquiler de dos viviendas; una, la suya propia, en la que residía, y otra en la que había realizado recientemente una chapuza -por eso tenía las llaves- y que aún no había sido ocupada por sus propietarios. El tipo enseñaba a los futuros inquilinos los pisos-señuelo y les pedía una señal de unos 200 o 300 euros por adelantado. Después, les entregaba unas llaves que no se correspodían con la cerradura del domicilio que supuestamente les había alquilado. La detención del estafador fue posible gracias a que una de las víctimas, J.M.M.G., de 53 años, natural de Ecuador y con permiso de residencia, le tendió una trampa con la ayuda de una amiga. El inmigrante denunció su caso en la oficina central de la Policía Municipal de Bilbao en la calle Colón de Larreategui. Él había entregado al estafador 300 euros por adelantado y después el individuo no contestaba al teléfono. La mujer que actuaba de gancho se hizo pasar por una interesada en el alquiler de un piso y quedó con el timador en la plaza Amezola para dirigirse a la vivienda, ubicada en las inmediaciones.
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